Los pacientes y familiares de la unidad pediátrica de Oncología del Hospital Luis Calvo Mackenna permanecen largas jornadas en las dependencias del hospital para realizarse sus tratamientos. Las voluntarias a cargo del carrito "Dulzura para el Alma", semana a semana, acompañan y entregan momentos de felicidad mediante galletitas, dulces, revistas y juguetes para aliviar un poco la amargura de la espera. Por otro lado, al involucrarse con cada historia, las voluntarias han logrado hacer realidad muchos sueños de estos niños (presentarles a un famoso, ir a un concierto o viajar a Disney!) y han remodelado de manera sustancial unidades completas del hospital, que se encontraban en condiciones precarias: el Banco de Sangre, la unidad de Oncología,una plaza y hasta el jardín infantil del hospital.
Hoy son miles los niños y familias que han recibido parte de esta dulzura, la que sólo es posible gracias a la recaudación y administración de donaciones que este grupo de voluntarias reúne.